Otro reflejo de otro destino

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Usa algo distinto a la autoflagelación
Va a un ritmo menos vertiginoso
Y sin embargo necesita la tenue luz brillante de la urbe nocturna
Dilemas hay en perseguir un sueño que no reduce su velocidad
Tranquilidad existe al saber que no se calla la boca
Así es cómodo
Así es placentero
Sólo se ausenta su rentabilidad
El apego a su propia mazmorra.

Sigue su curso en un sendero medio gris, medio luminoso, medio plata
Con algo de humo en su espacio
Una danza densa, pero suave
Un aroma que pasea como las nubes
Y ahí se termina
Situado en la misma cama de sueños
Bajo un incierto e insensible agradable viento de costa
Debe estar listo para el arribo de la gran verdad
El episodio en desarrollo
Un instante mínimo y sedimentado que transforma el rostro.

Ese otro deambuló en los dolores de su cerebro
Nadie lo culpa
Con las risas de sus neuronas sabemos que no se juega
Mas, pero, sin embargo, no cierra por completo la bóveda de su arrepentimiento
La probabilidad del odiado juego de la adaptación
Ese que no deja a las aves despegar
El mismo que no permite saltar
Supo guiar su sueño y su ego bajo el contexto protector
Sólo esas chaquetas podían abrigar su venerada humanidad
Y eso es aun para unos un pecado
Para otros la sonriente envidia
Para el cerebro un indicador.

Se dio tiempo para su reflexión
Sumiose en las encandilantes pena e ira
No debía pasar porque desordena el organismo
Disfunciona el cuerpo
Pero con tiempo se permite incluso transitar
Dejar abierto su celo quemando calles y paredes
Golpeando su recuerdo
Apretando dientes de ira y ojos de crueldad.

Mejor fue su odisea y sano viaje
Un escape. La rutina
El conocido puente entre la verdad y la ironía de vivirla
Supo relajar su espalda
Más vientos se acercaron a su cara
Los pasos helados hablan de un cierto futuro
Pero que vendrá a fracturar la columna
Y la significación educada piensa que debe aguardar su llegada.

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