Luce como diosa Elegante Arrojada, misteriosa Observa perdida Atrevida, resuelta, decidida Una amazona Un personaje de leyenda Valiente, sedienta, gladiadora Un animal que puede matar Qué será más grande –Me pregunto, imagino- Sus ojos, su cuerpo, su corazón Los esbozos de sonrisa Su fuerza como las montañas El significado de su respiro Es como un museo Un jardín ornamentado y bello Una selección de maestría Un ente de nivel mayor, extremo Una conmoción, recogimiento Contemplación, advenimiento Un monumento Admirable y admirado en paralelo El talento Su estrategia de conservación Los gustos e intereses Sus secretos La estética que desprende Los dibujos, las palabras La emoción Pupilas mojadas Pómulos rojos Deleites de su elección Arte en cada creación En cada extravío del presente En cada acierto En cada error Cómo no respirar profundo Su voluntad es lo mejor La personalidad La convicción desde el nacimiento Sus avances y desplomes La ficción de su realidad Esa especu
Lo Real (2023), Andrés Ibáñez No suelo escribir de aquello que no sé. Y, la verdad, no sé mucho de poesía. De todos modos, esta vez lo hago en un marco informal, no por eso menos relevante, tal vez menos exigente, pero serio y valorable. Se trata, además, de un escritor local. Un poeta, un profesor, un hombre que anda en moto. Un tipo que parece inofensivo. Sus letras, no tanto. Esto va de lo que es real. De las preguntas sobre qué es real y qué es lo que existe. Lo Real (Editorial Sismo, 2023) es la segunda obra de Andrés Ibáñez (la primera fue Al menos había un desierto [Demo Libros, 2019]), creación en la que mezcla distintos géneros de escritura que constituyen en conjunto una obra atrevida y demandante que, al parecer, pretende otorgar voz a aquellos que no la tienen. A los que, de tan reales, puede que estén al margen del poder y las racionalidades. Es en serio , dice el primer texto, como advirtiendo la realidad de sus gritos, de sus ruegos, preguntándose cómo es posible la r
Todo debiese girar Algo de locura Un poco más de amor Tal vez la máxima locura Tal vez el más grande amor He estado lejos, más bien solo He estado ajeno, más bien calmo Casi no hablo, casi no veo, casi no bebo Fumo por los que quiero, a destajo Me río harto Me molesto Paso de un lado a otro Nado y peleo Creo enamorarme, luego despierto No soy tan claro Soy extraño y normal Estoy medio trabado Dolores Infancias Los sueños Otro más que cree estar mal Nada original Ni siquiera tengo historias Nada que contar Debiese girar Dejar de frenar Saltar nada más Ver qué hay Qué se teje, más allá Tal vez encuentre vida Otro planeta Tal vez más cómodo Y se pueda respirar Eterna búsqueda Siempre soñando Nunca real Debiera ser valiente Pintar de forma permanente Escribir tal cual veo Registrar lo que siento Lo que quiero Tan sereno, tan dócil Tan funcional Puta educación de mierda Esa que no trata de existencia Sino de someter la voluntad Todo debiese ser rápido Espontáneo, natural Tendría yo que sonr
Se trataba de un domingo tranquilo. Lo era hasta ese estado (de WhatsApp). Ella apareció. Lo hace cada tanto. Es como los terremotos. Aparece poco, pero todo lo desarma. Habla y provoca risa. Mira y enamora. Se le observa y quema la respiración. Es una especie de princesa que se transforma en la reina de su familia. Cierro los ojos. Su imagen encandila mi visión. Miro al cielo, al mar, al horizonte. Está algo lejos. La verdad ni tanto. Siempre estará, en realidad. Se ve estupenda, guapa, lo mejor que puede estar. Siempre ella tan bella Natasha una estrella. Cuánta estampa, cuánta perfección. Una sublime manifestación humana. Un estado de buen físico y satisfacción. Lindura elocuente. Felicidad candente. Elegancia, frescura, plenitud. Abs. Excelsos. Marcados como por el fuego de la vida. Bondad, exquisitez. Un primor. La piel que protege las sesiones de motivación. Esfuerzos físicos, cognitivos, emocionales. Un triunfo. Un camino claro hacia los sueños. Peldaño tras peldaño. Nunca
Explorando el hilo interminable de la vida Un sendero, un espiral Donde nunca dejas de aprender Nunca se acaban las preguntas Donde muchas cosas cambian, algunas no Todo parece claro Pero he ahí un limbo de amor Los nervios, la falta de alimento Ella desordenando los tiempos, desorientación Dejando partículas de invocación Filtración de ternura y emoción Bella incomodidad Anhelaba su pasión, su ansiedad, el deseo Nada que sea común Hierve, la extraño, me inquieta Un juego sin control Solitario sí, pero no Solo aunque ligado Comprometido con un sentimiento Con algo de razón El amor, la ilusión, el enfado Las ganas de tenerla a mi lado, arriba, abajo Sin ropa, sin aliento, sin solución Regando sus líquidos en el encierro Apretando sus manos Sonriendo al dormir, al despertar Transformando la materia en algo rico Sin tiempo, juntos aquí y allá Nadando en un mar cálido Tempestuoso, envolvente, abrigado Sin explicación, sin argumentos ni planificación Conntentos, plenos, enamorados La he seg