Crítica musical


Banda: Knob

Género: Electrónica

Ciudad: Iquique

La música suena, pero pocos bailan. La música es buena, pero ellos esperan discoteca. Asumo que todo mal, pero es parte de la carrera. Me gusta Knob –Álvaro Flores y Diego Balbontín- porque aperra, se la banca. No tranza. Álvaro habla siempre de los primeros años, las primeras fiestas donde nadie iba. Se nota orgulloso. Es enfático. Siente que ha educado audiencia. Que han instalado estilo en Iquique, una ciudad donde escasea. Eso se respeta. La música de Knob es elegante, rebuscada, de culto. Exige gusto en quien la oye y la baila. En provincias tercermundistas, como ésta, eso es una luz en la caverna. Ellos asumen esa responsabilidad. No la sueltan por fama o por plata. Lo cual se admira y agradece. Todo extraterrestre lo capta.

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