Fundamento institucional
Es algo que quiero hacer, algo que
he de hacer, que tiene que ver conmigo, que tiene que ver con ella.
Contigo…
Es una forma de vida, una danza
genuina, un rumbo distinto entre las realidades de los sistemas.
Vivir de dos con respiros de
confianza.
De paso en la casa y siempre cerca.
Dos piezas separadas aunque
abiertas, dos baños distintos aunque posibles de cooperar.
Dos vidas distintas aunque
hermanadas en un tiempo y lugar.
Un sitio compartido, pero construido
de a uno.
De espacios solitarios y risas que
se puedan topar.
Cualquier recoveco, tanto tuyo como
mío; cualquier tarea, colaborada para la paz.
Una zona mixta, abierta, personal y
familiar.
Donde exista un vínculo eterno.
Un sol sin juicios ni recelos.
Solo amor pasajero y duradero.
Amor sin líos ni destierros.
Amor casi distinto, como lindo
aunque pragmático, como privado y carnal, a la vez que amistoso y esquivo.
Como si fuéramos amigos y tenemos
sexo y nos dejamos ir y luego, nuevamente cerca, seguimos sobreviviendo.
La idea es coexistir sin la
obligación de hacerlo.
Vivir con convivir.
Sin imponer.
Cuidando, al menos; siendo cortés-es,
tal vez.
Contar con el abrigo y el techo, con
la comida, el fuego, el cariño y los juegos.
Contar con libertad, autonomía, emancipación.
Con la incidencia justa de quienes
se comprenden y potencian advirtiendo que no hay control y tampoco miedo.
Que hay de todo con sus equilibrios y sus extremos, determinando presentes
y futuros según nuestro comportamiento.
Algo así como un azar que nos une
solo porque se incrementa el deseo.
Y así.
Una casa o un depa.
Dos piezas, dos baños y lo común.
Vista y aire, luz natural y el mar
como vecino.
Cortinas que vuelan con ventanas que
se abren.
Transitando alegres, tristes, con o
sin cuidado, con o sin ropa.
Ocupando tus sitios o los míos
cuando quiera –o no- cualquiera de los dos.
Saludando y despidiendo sin orden e
injusta memoria.
Dando sentido a necesitar del otro,
presente o no, pero permanente e incondicional.
Mirándonos con respaldo, con soporte
leal.
Siendo fieles en terrenos que pueden
llegar a ser múltiples o masivos.
Pudiendo escapar a veces, aunque teniendo siempre donde llamar, donde llegar, donde dormir y seguir sonriendo.
Pudiendo escapar a veces, aunque teniendo siempre donde llamar, donde llegar, donde dormir y seguir sonriendo.