Objeto

Es la sangre, es el vino, es el manjar, es el elixir, es el sexo, es la droga, es el orgasmo. Es la volá , el último viaje, la pequeña muerte, el dedo de dios, la ayahuasca, la salida del útero materno. Es la de Mark Renton en Trainspotting, la de Harry Goldfarb en Requiem for a Dream, pero más lenta, placentera, orgiástica y completamente sofisticada. De esos viajes que de solemnes, luego de un rato, solo te llevan a dormir y descansar. Hay éxtasis en la sangre. Hay éxtasis en morir. En las pequeñas muertes de la vida. En irse de la tierra un rato. En el placer que es sentir que se cae tu alma y tu energía. Como una gran pálida . Que de exquisitez corporal te lleva a acabar en paralelo a dejar de respirar. Como cuando se pierde sangre, o como cuando eyaculan los suicidas de ahorcamiento. Como lo que espera sentir Adam –asumo- al poner la pistola en su pecho. El arma cargada con la bala de madera que lo ha de matar. Extracto Crítica  Only Lovers Left Alive Director: Jim Jar

Y me siento devastado, conmovido. De frente a un ser genuino que pasó por la tierra –y las olas- como un destello. Y fue tan grande y encandilador que duró poco. Y como todo gran ídolo se fue pronto. Y, tal parece, no se olvidará. Esta película así lo intenta, sedimenta la existencia de una persona que lo dio todo. Que a quienes lo rodearon, influyó de tal forma, que ahora es una leyenda para ellos y para otros que nunca lo conocieron. Y así entonces es una tradición que ha traspasado fronteras. Todo por la magnitud de su vida, por su pasión por surfear, por enfrentar sus verdaderos miedos (maestro). Tanto así que se fue con ellos, o murió con ellos, como correspondía. Algo que tantas veces uno evita… Live like Jay…